Mis ánimos no estaban muy arriba al comenzar el día del ultimo homenaje, sentía que me faltaba euforia, quizá en ese entonces muy pocos sabían de mis secretos y de la forma tan intensa de ver la vida.
No hice caso al comentario, de que algo interesante podía pasar en el último minuto.
Poco a poco, conforme la tarde cumplía su cometido de llegar a su fin, el licor, la disposición y el buen humor, consumieron la cordura, la paciencia y la prudencia de todos, pero a quienes les pegó más fuerte; fue a los que guardabamos con desesperación ciertos aspectos de nosotros mismos que nunca creímos importantes, pero obviamente nos equivocamos.
Ahora, Comprendo que alguien que quiere vivir libre, se expone mucho más y no puede ocultar secreto alguno, pues en su momento más vulnerable será expuesto y lo dirá todo.
Que profundo pensamiento, pero recuerda que todos tenemos "etapas" y la vida ha sido, es y sera , solo nos toca disfrutar el camino , y evitar dedicarnos unicamente a llegar a nuestro destino
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